Thursday, April 20, 2006

EL DESAFIO DE LAS EDICIONES EXTRA - II

Luego de analizar lo que ocurrió en España el 11-M, Francisco Sancho, un especialista de la Universidad de Navarra, echa por tierra el valor de las ediciones extras: Por mucho que acelere su proceso industrial, el producto llega al quiosco completamente viejo, con datos desfasados que han sido y siguen siendo actualizados por los medios inmediatos[1].
Sancho atribuye las ediciones extra a viejos reflejos de los diarios, heredados de la época en que monopolizaban la posibilidad de informarse, pero asegura que nada aportan hoy frente a radio, televisión e Internet.
En este punto, sostiene que lo mejor es concentrarse en la edición del día siguiente, de modo de aportar a los lectores claridad, orden y concierto.
Por su lado, Carlos Jornet, director periodístico de La Voz del Interior, de Córdoba (Argentina)[2], guarda una posición de severa cautela: Los diarios ya no son, por ende, los medios más adecuados para enterarse de una información o para ver las imágenes de un suceso.
Jornet sitúa las diferencias en dos planos: por un lado, los avances de la radio y televisión con la fuerte presencia informativa que hoy las caracteriza, en especial si se piensa en los canales de noticias que transmiten 24 horas al día, tanto en el ámbito nacional como internacional. Por otra parte, los cambios de hábitos ciudadanos: ya no hay pausa al mediodía en la actividad laboral y, por ende, no hay tiempo que facilite la lectura, en medio del ajetreo, en especial en las grandes áreas urbanas.
Pero admite que sería un error carecer de un plan de trabajo para salir a la calle en forma urgente: se podrán admitir estos juicios negativos, pero nunca se sabrá en qué momento el minuto fatal es capaz de cambiar el mundo.
En cualquier redacción, un grupo de editores con habilidades bien desarrolladas podrá armar, en unas pocas horas, una edición de emergencia. Lo demás quedará en manos de tres áreas clave en el momento de las urgencias: Producción, para posibilitar una salida rápida; Marketing, para informar al público a través de los medios audiovisuales sobre la disponibilidad de la edición y, básicamente, Circulación, que deberá elaborar un circuito de distribución que posibilite la llegada del producto a las bocas de venta por fuera del circuito habitual.
Como se señaló capítulos antes, en esos momentos el diario –aun desactualizado, como postula Sancho– mantendrá su valor documental. De hecho, la experiencia indica que muchos lectores querrían tener esa edición en sus manos junto con la del día siguiente, probablemente porque sirve para congelar el recuerdo de momentos especiales, más allá del contenido periodístico.
Por cierto, el esfuerzo de ese momento no debería afectar el trabajo para los días subsiguientes, en particular si las dotaciones de personal son escasas.

[1] SANCHO, Francisco. “Edición extra... para nada”. Mediaccionline. Marzo, 2004. Disponible en: http://www.mediaccion.com/mediaccionline/temas/edicion/object.php?o=147
[2] JORNET, Carlos Hugo, director Periodístico de La Voz del Interior, Córdoba, Argentina. Consultado por al autor.

No comments: